En Adviento, urge revisar la dimensión social de cada cristiano
Jueves
4 Dic 2014 | 10:50 am Posadas (Misiones) (AICA): El
obispo de Posadas, monseñor Juan Rubén Martínez, aseguró que el tiempo de
Adviento debe llevar a revisar “cómo vivimos nuestra condición de cristianos
tanto en una dimensión personal, como social”. “La fe nos anima en la
esperanza. Este tiempo de Adviento, que iniciamos preparando la Navidad, puede
significar revisar nuestras vidas, estructuras y opciones. Cambiar es salir de
nuestras flaquezas y sombras personales y sociales, para abrir nuestro corazón
a Jesús, que quiere nacer”, subrayó.
El obispo de Posadas, monseñor Juan Rubén Martínez,
aseguró que el tiempo de Adviento debe llevar a revisar “cómo vivimos nuestra
condición de cristianos tanto en una dimensión personal, como social”, al
advertir que “a veces los cristianos hemos planteado casi excesivamente nuestro
examen de conciencia como algo individual y no lo hemos relacionado
suficientemente con nuestra vocación y misión”.
“El Adviento que nos propone revisar cómo vivimos nuestra condición de cristianos, discípulos y misioneros, debe llevarnos especialmente a plantearnos las consecuencias comunitarias y sociales que tienen nuestras opciones cotidianas. Esto es importante sobre todo considerando el ambiente fuertemente materialista e individualista en el que estamos inmersos, y con el cual corremos el riesgo de mimetizarnos dañando nuestra condición de cristianos, y la comprensión de la santidad en relación al bien común”, sostuvo en su carta semanal.
El prelado citó el documento de Aparecida, por considerar que algunos textos “iluminadores” permitirán comprender cuáles son los problemas culturales actuales, para luego “evaluar y revisar nuestro compromiso cristiano”.
“En estos contextos culturales fuertemente animados por grandes poderes económicos y su influencia en los medios de comunicación social, y fuertes presiones en ámbitos políticos, legislativos y de la educación, todos, pero especialmente el laicado cristiano deberá revisar en su examen de conciencia de Adviento cómo vive su vocación y misión”, sostuvo.
El obispo puntualizó que “desde la liturgia y espiritualidad del Adviento nos fortalecemos en la esperanza, porque aun comprometidos activamente en las coyunturas cotidianas, en los fracasos y alegrías dicha esperanza trasciende la cotidianeidad por tener su certeza en Dios”.
“La fe nos anima en la esperanza. Este tiempo de Adviento, que iniciamos preparando la Navidad, puede significar revisar nuestras vidas, estructuras y opciones. Cambiar es salir de nuestras flaquezas y sombras personales y sociales, para abrir nuestro corazón a Jesús, que quiere nacer”, concluyó.+
“El Adviento que nos propone revisar cómo vivimos nuestra condición de cristianos, discípulos y misioneros, debe llevarnos especialmente a plantearnos las consecuencias comunitarias y sociales que tienen nuestras opciones cotidianas. Esto es importante sobre todo considerando el ambiente fuertemente materialista e individualista en el que estamos inmersos, y con el cual corremos el riesgo de mimetizarnos dañando nuestra condición de cristianos, y la comprensión de la santidad en relación al bien común”, sostuvo en su carta semanal.
El prelado citó el documento de Aparecida, por considerar que algunos textos “iluminadores” permitirán comprender cuáles son los problemas culturales actuales, para luego “evaluar y revisar nuestro compromiso cristiano”.
“En estos contextos culturales fuertemente animados por grandes poderes económicos y su influencia en los medios de comunicación social, y fuertes presiones en ámbitos políticos, legislativos y de la educación, todos, pero especialmente el laicado cristiano deberá revisar en su examen de conciencia de Adviento cómo vive su vocación y misión”, sostuvo.
El obispo puntualizó que “desde la liturgia y espiritualidad del Adviento nos fortalecemos en la esperanza, porque aun comprometidos activamente en las coyunturas cotidianas, en los fracasos y alegrías dicha esperanza trasciende la cotidianeidad por tener su certeza en Dios”.
“La fe nos anima en la esperanza. Este tiempo de Adviento, que iniciamos preparando la Navidad, puede significar revisar nuestras vidas, estructuras y opciones. Cambiar es salir de nuestras flaquezas y sombras personales y sociales, para abrir nuestro corazón a Jesús, que quiere nacer”, concluyó.+
No hay comentarios.:
Publicar un comentario